Vivimos tiempos increíbles, la capacidad de actualización en los sistemas tecnológicos crecen a un ritmo brutal, permitiendo imaginar tareas que antes simplemente eran imposibles y caían en el terreno de la ciencia ficción, donde la batalla que están librando Estados Unidos y China por el dominio del computo especial de gran potencia es el más claro ejemplo de ello.
Hace tan sólo unos días conocimos a Sunway TaihuLight, el nuevo superordenador de manufactura china que llegó a destronar al Tianhe-2, también chino, con una sorprendente velocidad de 93 petaflops. Pero la batalla apenas comienza, ya que los Estados Unidos han confirmado la creación de Summit, su nuevo y potente superordenador que tendrá una bestial capacidad de 200 petaflops.
Summit, el superordenador de IBM y Nvidia
El Departamento de Energía de los Estados Unidos a través del Laboratorio Nacional Oak Ridge ha confirmado que han empezado la construcción de Summit, el nuevo superordenador que tendrá una capacidad de 200 petaflops (donde un petaflop es la capacidad de realizar mil billones de operaciones aritméticas por segundo) y estará impulsado por un sistema IBM Power9 y GPUs Nvidia Volta.
Este anuncio es claramente una respuesta a Sunway TaihuLight, donde los estadounidenses no quieren demostrar que están en desventaja a pesar de que el desarrollo en computación de alto rendimiento de China ha crecido de forma impresionante desde 2001, quienes al día de hoy tienen 167 superordenadores operativos, mientras que Estados Unidos cuenta con 165 operativos más Summit y otros dos sistemas que llegarían en 2018.
Además de Summit, Estados Unidos prepara 'Sierra' también basado en sistema IBM que se espera tenga una potencia de 150 petaflops, estará ubicado en el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore y arrancará operaciones a mediados de 2018. Y por otro lado tenemos a 'Aurora' que estará ubicado en el Laboratorio Nacional de Argonne hacia finales de 2018 donde intervienen sistemas de Cray Computing e Intel, que se estima tendrá una potencia de 100 petaflops.
Pero esto no termina aquí, ya que hay que recordar que en 2015 Barack Obama autorizó la creación de la Iniciativa Nacional Estratégica de Computo, con la que empezaron el desarrollo del primer superordenador exascale que funcionará a 1.000 petaflops, una bestia que se posicionará como el ordenador más potente jamas creado y que estará destinado a llevar las operaciones de gran parte de los organismos gubernamentales del país.
Así que la batalla apenas comienza y esto se pone cada vez más interesante.
Más información | Summit
Vía | Computerworld